Como hemos
visto a lo largo de las diferentes entradas publicadas, María Lejárraga destacó
en diferentes ámbitos:
- Desde muy joven mostró un gran interés por la educación de los más pequeños e intentó mejorar el sistema educativo del momento.
- Fue una mujer muy consciente de la situación patriarcal y llevó a cabo acciones para mejorar la vida de las mujeres y abrirles las puertas del conocimiento y de la educación.
- Asimismo, era una defensora de la causa republicana y animó a las clases sociales más desfavorecidas a luchar por sus ideales y su libertad.
- El teatro se convirtió en su gran pasión y escribió numerosas obras teatrales que triunfaron sobre todo en la primera mitad del siglo XX.

“La prueba, antes de que en el año 1987 Patricia W
O´Connor lo demostrara con abundante documentación en su
libro Gregorio
y María Martínez Sierra: Crónica de una colaboración, está en los
abundantes testimonios, sobre todo de gentes del teatro que estrenaron sus
obras y que sabían quién escribía, mientras el multifacético Gregorio atendía
todos los frentes cara al público. Ella siempre lo quiso así y, este libro de
memorias fragmentario, pues se centra fundamentalmente en los retratos de los
grandes amigos y en la génesis de las obras, es ante todo la reivindicación de
su autoría conjunta en plano de igualdad con su compañero. Una actitud, que
intuimos muy a su pesar, en los últimos años, se ve como incomprensible y sólo
explicable en el contexto de inferioridad de la mujer de la época” (Gayarre,
2018).
María
Lejárraga, ya al final de su vida, decidió hacer público este secreto y por eso
escribió este libro auto-biográfico. Además, tal y como recoge Alda Blanco en
su prólogo, María Lejárraga reivindicó la propia autoría en una de las cartas
que le mandó a su hermano Alejandro:
“De que soy colaboradora en todas las obras no cabe la
menor duda, primero porque es así, y después porque lo acredita el documento
voluntariamente redactado y firmado por Gregorio en
presencia de testigos que aún viven y que dice expresamente: 'Declaro para todos
los efectos legales que todas mis obras están escritas en colaboración con mi
mujer, Doña María de la O Lejárraga y García. Y para que conste
firmo esta en Madrid a catorce de abril de mil novecientos treinta' […]”
(Blanco, citado en Gayarre, 2018).
El tema de la autoría de las obras, por tanto, contrasta
con el feminismo que defendía María Lejárraga. Mientras luchaba para que las
mujeres tuvieran libertad y pudieran acceder al mundo cultural, ella misma
permitió que todo el reconocimiento de sus obras se lo llevara íntegramente su
marido Gregorio. Sin embargo, no se sabe con total exactitud por qué razón
María siguió adelante con este acuerdo y por qué decidió revelarlo solo al
final de su vida. Así lo muestra la experta en la autora Patricia O’Connor:
“Considerando la
creencia de María en los derechos de la mujer, su actitud pasiva con respecto a
su importante trabajo literario (y de conocerse, podía haber inspirado a otras
mujeres) es contradictoria. Una posible explicación puede encontrarse en un ensayo
feminista suyo profético de 1917: “Las mujeres callan… porque creen firmemente
que la resignación es virtud… callan por costumbre de sumisión… callan, porque
en fuerza de siglos de esclavitud hab llegado a tener alma de esclavas” (Feminismo… 105-106). Años más tarde, la
autora demuestra un juicio más severo sobre los maridos que se aprovechan de
sus mujeres en No le sirven las virtudes
de su madre (1930): “Fue tu compañera, y no fue tu igual… Pensó contigo,
luchó contigo, trabajó contigo, afanó contigo…; ‘tú solo triunfaste!” […]”
(Connor, 1987 citado en BermeMar.com)
Tal
y como hemos visto, por tanto, María Lejárraga fue una mujer que podría haber
destacado más durante el siglo XX pero que, desgraciadamente, permaneció bajo
la sombra de su marido. Una mujer tan polifacética como Lejárraga podría haber
servido de ejemplo para muchas mujeres de la época y haber influido más en el
pensamiento colectivo del momento. Afortunadamente, en las últimas décadas del
siglo XX, María Lejárraga comenzó a tener el protagonismo que se merecía y han
sido numerosas las estudiosas que han publicado libros y ensayos sobre María
Lejárraga.
Si queréis saber más información sobre esta autora, Patricia O’
Connor, Alda Blanco y Antonina Rodrigo (María
Lejárraga, una mujer en la sombra) han escrito interesantes libros dedicados
íntegramente a la autora. También podéis leer los dos libros auto-biográficos
de María Lejárraga (Una mujer por caminos
de España y Gregorio y yo. Medio
siglo de colaboración). Os vuelvo a recomendar el documental publicado por
RTVE donde hacen un repaso de su biografía y de sus amistades con diferentes
poetas y escritores: http://www.rtve.es/alacarta/videos/mujeres-en-la-historia/mujeres-historia-maria-lejarraga/838011/
Bibliografía
Delgado, M.
A. (30 de julio de 2016). María Lejárraga, la feminsita sumisa. El Español.
Recuperado el 15 de 5 de 2018, de
https://www.elespanol.com/cultura/20160728/143486478_0.html
Gayarre, P. A. (2 de septiembre de 2017). Gregorio y
yo. La "negra" de Martínez Sierra se confiesta. El Digital CLM.
Recuperado el 15 de 5 de 2018, de
https://www.eldigitalcastillalamancha.es/blog-de-lecturas/153620302/Gregorio-y-yo.-La-negra-de-Martinez-Sierra-se-confiesa.html
Prieto, I. (s.f.). María
de la O Lejárraga: La cuestión de la autoría. Recuperado el 15 de 5 de 2018, de BermeMar.com:
http://www.bermemar.com/ESPECIALES/maria/mar_autoria.htm
Prieto, I. (s.f.). María de la O Lejárraga.
Recuperado el 19 de 4 de 2018, de BerveMar.com: http://www.bermemar.com/ESPECIALES/maria/marmoder.htm
Rodrigo, A. (2005). María Lejárraga: una mujer en
la sombra. Barcelona: Al
gaba.
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