MARÍA TERESA LEÓN: LAS
HISTORIAS NO CONTADAS
El
interés de María Teresa León por la literatura le llevó a la lectura de toda
clase de obras. Ella tenía especial preferencia por lecturas que, según la
ideología de carácter tradicionalista que imperaba en su escuela, eran poco
adecuadas para las jóvenes de su época.
A
partir de 1941 comenzó a desarrollar el género novelístico. En ese mismo año, publicó su primera novela Contra viento y marea, la cual está dividida
en dos partes. En la primera de ellas, la autora nos presenta la lucha
revolucionaria que se dio en Cuba. A través de este hecho histórico, María
Teresa plasma sus experiencias del año 1935, cuando estuvo en La Habana. Por
otro lado, la segunda parte de la obra se centra en la Guerra Civil española,
de la que transmitirá su propia visión. Nos encontramos ante una novela de
fusión donde se combinan dos relatos desarrollados en diferentes lugares y
épocas. A pesar de que ella quería publicar esta obra en 1939, para poder
superar la situación de necesidad en la que se encontraba su familia, le fue
imposible a causa de que consideraban, en la editorial, que las historias
dramáticas no tenían interés. En 1944 publicó La historia tiene la palabra, escrita en el exilio, con la que transmitirá su testimonio de
la República y de la defensa del arte.
Entre
sus novelas, María Teresa destacó por escribir biografías. En conjunto compuso
cuatro biografías: El gran amor de Gustavo Adolfo Bécquer (1946), Don
Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid campeador (1954); Doña Jimena Díaz de
Vivar, gran señora de todos los deberes (1960) y Cervantes. El soldado
que nos enseñó a hablar (1978). También redactó su autobiografía Memoria
de la melancolía en 1970.

La
siguiente novela, que pertenece a las cuatro biografías, es Don Rodrigo Díaz
de Vivar, el Cid campeador, escrita en 1954. Se estructura en tres partes, con siete capítulos cada una. Para la autora, esta novela tiene especial
importancia porque ella rememoraba continuamente la leyenda del Cid en su
infancia. En ella es donde había conocido grandes textos, de entre los cuales
la historia del Cid fue la que más le impactó. En la casa de sus tíos, además,
encontró muchos escritos, como La España del Cid de Ramón Menéndez Pidal,
Las mocedades del Cid de Guillén de Castro, entre otros, que le
sirvieron de fuentes de inspiración. La historia, además, se ajusta a los datos
históricos y literarios que conservamos del héroe. Dedicó la obra a su hija
Aitana por pertenecer a la casta de los burgaleses.


Además
de este grupo de novelas, también escribió su propia biografía titulada Memoria
de la melancolía. Publicada en 1970, en Italia, es el libro donde mejor
expresa todas las sensaciones y experiencias de su vida. A pesar de que en
aquella época tenía una cierta estabilidad familiar, en su obra se observa
muchos momentos de melancolía y sufrimiento. Es, por tanto, una obra del
recuerdo. Se puede observar cómo describe los acontecimientos con una gran
fuerza evocadora a través de la que transmite el impacto que causaron ciertos
sucesos en su vida, como la muerte de sus amigos. Para lograr esta magnífica
obra se basó en sus recuerdos y emociones que plasmó en el papel a través de un
lenguaje que rozaba el lirismo. No solamente se centró en expresar sus
vivencias, sino que representó también a la generación luchadora. Agrupa, por
tanto, en una sola voz a todo el colectivo que peleó tantos años por la libertad.
En otoño de 1968 fue cuando dio por terminada la obra, antes de que muriera su
tío Menéndez Pidal, al que se refiere en ella.
Por
último, nos encontramos con dos novelas que no tuvieron tanta repercusión. En Juego
limpio de 1959, María Teresa pretendía rendir homenaje a sus compañeros de
las Guerrillas del Teatro. Entre ellos se encontraba Juana Cáceres, a quien le
debe la escritura de esta obra, por recordarle aquellas vivencias. Estuvo redactando el texto durante veinte años. Tras ese tiempo, logró crear una obra que transmitía esa sensación de fatalidad que ella misma sentía. El protagonista destaca por no ser ficticio, ya que se
cree que está basado en un monje real llamado Camilo. A través de este
personaje, María Teresa quería expresar el sentimiento de derrota y fracaso
de la justicia y del progreso. De nuevo, el recuerdo y la nostalgia son dos
ejes fundamentales en la historia.
La
segunda obra es Menesteos, marinero de abril que apareció en México en
1965, pero que hasta 1972 no se publicó en España. Su talento para crear
imágenes con gran belleza se plasma en este relato donde habla de Menesteos, el
rey de Atenas. María Teresa se basó en la historia clásica para inventarse su
propia versión sobre este personaje, gracias a su gran cultura. De nuevo, a
través del mundo griego, expresa el sentimiento de angustia ante el exilio y el
deseo de regresar a la patria.
Por
consiguiente, se puede observar cómo el subgénero narrativo que más desarrolla
es el biográfico. La autora presenta las vidas de estos personajes de una
manera muy especial al centrarse en sus emociones y perspectivas personales.
Por tanto, estamos ante biografías muy novedosas donde prima la expresión de
sensaciones que de hechos vividos. Además, María Teresa elige a estos
personajes especialmente porque considera que son modelos de lucha, como Doña
Jimena Díaz de Vivar, o maestros en el arte de la vida a través de sus textos, como Miguel de Cervantes.
Bibliografía y
webgrafía
· Castillo Robles, María
José (2013), María Teresa León y Doña
Jimena, mujeres de España, Almería: en la revista Philologica Urcitana
(Vol. 9). Enlace del artículo: https://w3.ual.es/revistas/PhilUr/pdf/PhilUr09.2.CastilloRobles.pdf (Última consulta: 13/05/18)
· Ferris, José Luis
(2017), Palabras contra el
olvido, vida y obra de María Teresa León (1903-1988), Sevilla:
Fundación José Manuel Lara.
· Grandes, Almudena
(2005), María Teresa León: memoria de la
hermosura, Madrid: Fundación Autor, Iberautor Promociones Culturales.
· León, María Teresa (1999), Memoria de la
melancolía, Barcelona: Galaxia Gutenberg.
· León, María Teresa (2004), Doña Jimena Díaz de
Vivar, Gran Señora de todos los deberes, Madrid: Editorial Castalia.
· Perugini, Carla (2013), Una biografía novelada de María Teresa León: Cervantes, el soldado que
nos enseñó a hablar, Italia: HIPOGRIFO. Enlace del artículo: https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4901109.pdf (Última consulta: 13/05/18)
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