sábado, 12 de mayo de 2018

El mismo mar de todos los veranos, Esther Tusquets.


"...Y Wendy creció"
J.M. Barrie

Esther Tusquets comienza a escribir tarde, ya sea por la tarea que su editorial le daba o por cualquier otra causa que desconocemos. Aun así, ella siempre ha dicho en muchas entrevistas que empezó a escribir desde bien pequeña y que continuó con ello durante toda su vida. Sin embargo, hasta 1978, con cuarenta y dos años, no publicó su primera novela. Le costó mucho decidir si hacerlo no, ya que Esther Tusquets, al igual que otras escritoras como Carmen Laforet, era extremadamente autocrítica y nunca se atrevía a enseñar al mundo aquellas novelas que, para ella, eran realmente detestables. Esta obra fue, para la sorpresa de la escritora, bien acogida por las críticas, algo realmente curioso, ya que en 1978, en plena transición, este libro fue uno de los primeros en tratar con toda libertad el tema del lesbianismo. Carmen Martín Gaite, al igual que su amiga Ana María Moix, quedó encantandísima con la obra y fue una de las primeras en responder a esta novela con una carta que decía lo siguiente:

“Querida amiga, tu novela El mismo mar de todos los veranos, que acabo de terminar, me ha deslumbrado. Sumida todavía en el sortilegio reciente de su lectura, y antes de que dé paso a la tentación de una crítica reflexiva y razonable, te quiero dar las gracias por la tarde tan larga, tan diferente a todas, que me has proporcionado.” (Carmen Martín Gaite en una carta a Esther Tusquets)

Resultado de imagen de trilogia del marCon el tiempo, este libro se convirtió en el primero de una trilogía a la que Esther Tusquets denominó como Trilogía del mar, y al que le siguieron otras dos novelas: El amor es un juego solitario (1979) y Varada tras el último naufragio (1980). Todas ellas fueron traducidas en diez lenguas diferentes, entre ellas el italiano o el alemán. 

En su primera obra, El mismo mar de todos los veranos, se narra la historia de Elia, una mujer de unos cincuenta años perteneciente a la burguesía catalana que es profesora en la universidad de literatura universal. La acción se desarrolla en unos veinticinco o veintiséis días en los que Elia vuelve a la antigua casa de sus padres, situada en un pueblecito frente al mar y cerca de Barcelona. Allí la protagonista se introduce en un espacio lleno de recuerdos que van a acentuar la crisis existencial que está sufriendo y que le harán reflexionar sobre su vida tanto en presente como en pasado.

“Porque me he encerrado aquí como se refugia una alimaña enferma en su cubil, en un intento quizá desesperado de tender mágicos puentes entre esta niña de aire envejecido, [...] y aquella niña triste, que no tuvo otra compañía que la de sus fantasmas.” (TUSQUETS E., 2008, El mismo mar de todos los veranos, Barcelona: Anagrama, pág. 30)

Resultado de imagen de Esther Tusquets y el mismo mar de todos los veranosElia, durante estos días, se encuentra sola, ya que su marido Julio, su hija Guiomar y su madre están fuera de España inmersos en sus negocios. Esta familia es un reflejo de aquel entorno propio de la burguesía catalana que tanto conoce y que tanto ha rechazado la autora. Quizá por esto, Elia tampoco encaja en él y necesita una escapada a la antigua casa de sus padres, donde recuerda su infancia y su juventud. Maite, una antigua amiga de Elia, va a visitarla y a hablarle sobre Clara, una alumna que despierta el interés y la curiosidad de la protagonista y con la que comenzará una relación amorosa. Elia contempla a Clara, al igual que a su madre o a su hija, de una forma casi divina muy parecida, en mi opinión, a la forma que tenía Humbert de contemplar a Lolita en el libro de Vladimir Nabokob.

“-entre un marido fatuo que se escapa siempre hacia islas posibles y conocidas, de las que regresa también siempre, una madre remotísima viajera que manda abrazos en postales, y una hija grandota y sabihonda que nunca ha entendido nada de nada, un marido una madre y una hija que me lanzan su amor al abismo [...] de esta soledad sin esperanzas, emerge de otro mundo, de otro tiempo, de otros planetas, una muchacha que trae consigo toda la magia de las noches insomnes.” (TUSQUETS E., 2008, El mismo mar de todos los veranos, Barcelona: Anagrama, pág. 123)          

El tiempo que Elia pasa con Clara parece servir para hacerle olvidar los problemas que le habían hecho encerrarse en sí misma. Esta joven rompe su aislamiento y penetra hasta lo más recóndito de su ser, descubriendo así historias que Elia tenía olvidadas. El paraíso que juntas construyen en aquella casa pronto se ve destruido con la vuelta de Julio, marido de Elia. La protagonista se siente obligada a volver con él y con aquella farsa de relación que tan oprimida le tenía. Elia decide regresar a sus fantasmas, a sus laberintos y a sus miedos, y así es como Wendy creció, renunciando a la felicidad y a la juventud eterna que Clara podría ofrecerle.

 “juntas, sin fin juntas, siempre amándonos, y convirtiendo este amor en mágica palanca que pueda transformar el mundo, porque este amor excepcional -ha decidido Clara-, este amor que se da tal vez solo una vez cada mil años, no puede concluir en nosotras mismas, debe abarcar también a todos los oprimidos, a todos los tristes, a todos los injustamente pisoteados, a todos los solitarios de la tierra, este amor debe ser capaz de arrastrarnos hasta cimas insospechadas, debe llevarnos a trasgredir por fin todos los límites, a violar de una vez para siempre todas las normas, y luego a reinventarlas.” (TUSQUETS E., 2008, El mismo mar de todos los veranos, Barcelona: Anagrama, pág. 185)

Resultado de imagen de el mismo mar de todos los veranosLa novela se trata de un monólogo interno y profundo de la autora que carece de diálogos. No es una novela de fácil lectura, necesita mucha concentración, ya que el texto es enrevesado, confuso y difícil en muchas ocasiones debido a los saltos cronológicos y al lenguaje poético de Esther Tusquets plagado de metáforas. A esto se le suman las constantes referencias mitológicas, que cargan la obra de una belleza, además de poética, intelectual. La intensidad que Esther utiliza en esta obra a la hora de expresarse es lo más interesante de la misma, además de los temas que trata, todos ellos en torno al amor y al erotismo: un amor sensible y tierno que nos hace reflexionar sobre las relaciones humanas sin importar el género. Los personajes más interesantes de esta obra son femeninos y, sobre todo, Elia, de quien se hace un estudio psicoanalítico durante toda la obra. A esta le siguen su madre, descrita como una persona distante, pero a la que diviniza por su belleza y su perfección, y Guiomar, su hija, quien echó a volar del nido más pronto de lo normal y quien no mantiene relación apenas con su madre. Todos estos personajes están estrechamente relacionados con la vida de la autora y, se podría decir, que Elia está basada en la misma Esther Tusquets.

El mismo mar de todos los veranos narra los procesos autodestructivos que muchas veces llevan consigo las relaciones amorosas. Es un libro que habla de la soledad y del abandono, de la familia, del rechazo y de la incomprensión. Todo ello revestido de una poética y una sintaxis espectacular que cala en el lector desde la primera página y que le hace reflexionar sobre lo que somos, lo que fuimos y lo que nos gustaría ser. Se trata de una obra que reflexiona sobre la infancia y la juventud de la que un día despertaremos, pero de la que siempre tendremos tiempo de volver acompañados de aquellos que nos hagan sentirnos niños de nuevo.

“y sé que podré repetir un millón de veces el mismo recorrido suave de su cuerpo con mis manos, susurrar interminablemente las mismas palabras tontas en su nuca tibia, escucharla dormir plácida y a estrechos suspirante mientras espero la muerte con el alba.” (TUSQ-UETS E., 2008, El mismo mar de todos los veranos, Barcelona: Anagrama, págs. 158-159)


Imagen relacionada
Esther Tusquets, al fondo, y su hija, también escritora y editora, Milena Busquets.



Bibliografía:

-TUSQUETS E., 2008, El mismo mar de todos los veranos, Barcelona: Anagrama.
-TUSQUETS E., 2005, Confesiones de una editora poco mentirosa, Barcelona: RqueR.
-Nostromo. Esther Tusquets escritora y editora. RTVE documental. Recuperado de: http://www.rtve.es/alacarta/videos/nostromo/nostromo-esther-tusquets-escritora-editora/2872737/ (12/05/2018)
-MAZQUIARÁN DE RODRÍGUEZ M., El mismo mar de todos los veranos y carta a la madre: un diálogo intratextual. Centro Virtual Cervantes. Recuperado de:
https://cvc.cervantes.es/literatura/aih/pdf/13/aih_13_3_086.pdf (12/05/2018)

6 comentarios:

  1. Yo también he leído 'El mismo mar de todos los veranos' y me sorprendió mucho la forma de escribir de Esther Tusquets, ya que era su primera novela. Se nota que antes de escribir leyó muchas obras durante su labor en la editorial.
    No sabía que la trilogía continuaba, así que me leeré las siguientes novelas. Gracias por la información, Esther.

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    1. Tienes toda la razón, su etapa como directora en la editorial le hizo aprender mucho sobre el quehacer literario. Creo que sin Lumen Esther no habría sido la escritora que fue. Las otras dos novelas son muy interesantes y mantienen los mismos personajes que 'El mismo mar de todos los veranos'. Si te ha gustado este primer libro estoy segura de que los demás también.

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  2. Yo no la he leído, pero me la apunto. Me recuerda a la película de 2010 “Habitación en Roma”, donde las protagonistas viven una apasionada noche, pero después se separan y vuelven a sus respectivas vidas.

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    1. No he visto esa película, me la apunto. Yo la asocié bastante con 'La vida de Adele' o 'Call me by your name' también.

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